En el marco de los países desarrollados, las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) se han convertido en un elemento imprescindible en nuestras vidas, casi al nivel de los suministros básicos. La demanda de profesionales que puedan impulsar este tipo de servicios no para de crecer, y la brecha de género es uno de los principales impedimentos para poder darle respuesta . Se calcula que solo un 30% de los empleos relacionados con las TIC están ocupados por mujeres. Esta cifra tiene su origen ya en las orientaciones profesionales, pues solo el 35% de las matriculaciones que se realizan en carreras de ciencias, tecnología, ingenierías y matemáticas, están hechas por mujeres. Se han realizado varios estudios sobre las posibles causas de este problema, y, entre otros factores, en todos ellos se destaca el daño que hacen los estereotipos que se han creado en torno a este tipo de perfiles. Piensa en alguna película o serie de televisión en la que aparezca un informático. Y ahora